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Pidieron que el tribunal dicte las condenas a los acusados. La sentencia por el accidente, que causó 52 muertes y dejó casi ochocientos heridos, se dará a conocer la próxima semana. El juicio se desarrolló en más de 130 audiencias.
A dos meses de que se cumplan 4 años del choque ferroviario en la estación de Once -donde 52 personas murieron y 789 resultaron heridas- familiares y amigos de las víctimas realizaron un acto para recordarlos y reclamar justicia por ellos. “Cuando en dos días, estemos levantando las copas, tendremos dos deseos: que la luz de estos corazones que resplandece en nuestra lucha no se apague nunca, y que el próximo 29 la Justicia dicte las condenas que merece escuchar el golpeado cuerpo de esta República”, concluyeron en el comunicado que dieron a conocer esta mañana.
Hicieron así alusión a la sentencia que en una semana dará a conocer el Tribunal Oral en lo Criminal Federal 2 en el juicio que tiene entre los 28 imputados al motorman de la formación siniestrada, Marcos Córdoba; a los ex secretarios de Transporte, Juan Pablo Schiavi y Ricardo Jaime, y a los ex titulares de Trenes de Buenos Aires (TBA), Mario y Sergio Cirigliano.
Aseguran los familiares de las víctimas que llegan a esta instancia “cruzados por el dolor” porque “aún cuando la sentencia sea condenatoria para los procesados, como estamos seguros de que sucederá, no habrá nada que festejar. No se puede tener alegría por un fallo que condene a los responsables, cuando por ellos es que nos faltan 52 inocentes”.
Hicieron después una descripción del derrotero del juicio que comenzó en marzo de 2014 y acumuló más de 130 audiencias y más de un centenar de testigos. En alusión a este denunciaron el rol de “abogados querellantes en esta causa, que en lugar de defender los derechos de sus clientes, se aliaron y alistaron sin el menor prejuicio tras las estrategias de los defensores”. En el comunicado leído en el acto y difundido a través de las redes sociales denunciaron que “la masacre del 22 de febrero comenzó gestarse muchos años antes, abonada por el abandono al servicio y al usuario, mientras la corrupción crecía a la sombra del poder”.
"Los corruptos deben quedar en una cárcel común y con prisión efectiva", reclamó Paolo Menghini, padre de una de las víctimas del choque, al leer el documento. También reclamaron condenas por el resto de los procesados, directores y funcionarios de las áreas contables, jurídicas y técnicas de TBA, que “por acción directa o por omisión” tuvieron “un rol claro en lo que pasó.
“En siete días estaremos escuchando el fallo del Tribunal. Esperamos que sea el que la sociedad reclama y el que deseamos oír. La enorme mayoría del pueblo ya dio su veredicto: la condena social a los responsables de la muerte de nuestros familiares es un hecho tangible. Todos lo sabemos”, apuntaron. Y concluyeron: “No habrá una Argentina distinta con corruptos sueltos ni habrá Argentina sana con muertes impunes”.
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