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La Sala Primera del tribunal de apelaciones ratificó la resolución del juez federal Daniel Rafecas quien procesó, con prisión preventiva, al ex comisario de Policía Federal Carlos Alberto Lorenzatti, alias “Gato Viejo”, y al oficial mayor Juan Carlos Chacra, alias “Paco”, por gravísimas violaciones a los derechos humanos. 

Fuentes judiciales indicaron esta mañana a Télam que ambos ex jefes policiales -quienes están alojados en el penal de Marcos Paz- eran "dos de los máximos responsables de inteligencia dentro de esos campos del terror", dijeron allegados a la investigación, quienes explicaron que Lorenzatti era el segundo jefe de ese centro clandestino y Chacra su subordinado inmediato.

En esa función, Chacra, como "hombre del área de Inteligencia" de la Superintendencia de Seguridad Federal, solía participar en los interrogatorios de las víctimas dentro del centro clandestino; y también en sus secuestros, a la vez que era quien informaba a las víctimas que serían liberadas y les imponía determinadas pautas de comportamiento".

Para dictar los procesamientos Rafecas tuvo por probado que tanto Chacra como Lorenzatti intervinieron como "coautores en la privación ilegal de la libertad y en la aplicación de tormentos de centenares de personas que estuvieron cautivas en el centro clandestino, bajo condiciones infrahumanas de existencia".

Las fuentes explicaron que la metodología en esos centros -que funcionaron entre 1976 y 1979- donde "las personas cautivas fueron sometidas a tratos inhumanos y degradantes considerados como torturas" entre ellos "la sujeción, falta de alimentación, de higiene, prohibición del habla, amenazas constantes de muerte y tortura y la exposición a desnudez", entre otras.

La oportuna elevación a juicio se sumará "a los ya casi veinte condenados que el magistrado envió a juicio oral por los sucesos acontecidos en dicho circuito represivo, entre los cuales se encuentran Samuel Miara, Roberto Antonio Rosa, Julio Héctor Simón alias “el Turco Julián” , y Raúl Antonio Guglielminetti".

La medida se inscribe en el marco de la megacausa que investiga Rafecas por delitos de lesa humanidad cometidos en la órbita del Primer Cuerpo de Ejército y que fue reabierta tras la derogación y declaración de “nulidad insalvable" de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final.