Infojus Noticias

El ex policía Mario Bareiro deberá presentarse a declarar hoy frente al Tribunal Oral Federal 2, esta vez como testigo en la misma sala que lo tuvo sentado en el banquillo de los acusados en el juicio por el atentado a la AMIA, que se desarrolló entre 2001 y 2004. El TOF 3 absolvió a los policías imputados y declaró nula la causa.

En este juicio por encubrimiento, el ex policía integra la querella de los agentes de la Bonaerense. Junto a Juan José Ribelliy Anastasio Leal, Bareiro estuvo presos ocho años por orden de los funcionarios que están hoy imputados en la causa: el entonces juez Juan José Galeanoy los ex fiscales Eamon Mulleny José Barbaccia, entre otros.

Bareiro trabajó en 1984 en la comisaría de Santos Lugares, donde conoció a Carlos Telleldín, quien se desempeñaba como informante de actividades ilícitas. A principio de los años noventa fue trasladado a la División Sustracción de Automotores de Vicente López y en 1992 trabajó en la Brigada de Investigaciones de San Martín. En mayo de 1994 fue enviado como oficial inspector a la Brigada de Investigaciones de Vicente López, donde ya trabajaban el subcomisario Jorge Rago y el principal Anastasio Leal, hoy querellantes en la causa encubrimiento

Un mes antes del atentado, en junio del 94 los agentes comenzaron a investigar a Telleldín por la compraventa de automotores robados.  Según había declarado Bareiro en el proceso judicial por el atentado, el objetivo era detener al doblador de autos para “obligarlo a arreglar” y que éste pudiera continuar con su ilícita actividad. Fue por ello que el 14 de julio de 1994 llevaron a cabo un procedimiento en la casa de Telleldín, quien tras una persecución, logró escapar.

En la audiencia pasada, Anastasio Leal declaró como testigo y confirmó su participación en el intento de detención a Telleldín. Recordó que estaban investigándolo porque mandaba a robar vehículos siniestrados y luego les remarcaba el número de motor y carrocería para venderlos. Las defensas quisieron ahondar en este hecho pero Juan Manuel Ubeira, abogado de Leal y del resto de los policías, se opuso. Por estos procedimientos de la Brigada de Vicente López algunos agentes continúan siendo investigados en una causa en el Juzgado Federal N°1 de San Isidro, a cargo de la jueza Sandra Arroyo Salgado.

Previo a la declaración de Leal, el pasado jueves, el ex subcomisario de la Brigada de Investigaciones de Lanús, Juan José Ribelli aprovechó su declaración testimonial para traer a la luz un informe de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) de los Estados Unidos, presentado en 1998 al entonces juez de la causa, Galeano, quien lo había incluído en el expediente como documento de “carácter reservado”. Allí se deja constancia de la falta de pruebas para imputar a los policías bonaerenses por el atentado. “En ese informe estaba claro que tanto el FBI como el Mossad –servicio de Inteligencia israelí– no tenían duda que la conexión local de los policías no tenía nada que ver”, explicó Ribelli. 

La querella del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, acompañada por otros acusadores, pidió que este documento se incorpore como prueba en el debate. Los jueces del Tribunal Oral Federal 2 -Jorge Gorini, Néstor Costabel y Karina Perilli- deberán expedirse al respecto en la próxima audiencia, este jueves 12 de noviembre.

DM/RA